La preciosa alhaja de la corona española: La Mina de la Muerte - SANTA BARBARA
El auto empieza la partida en un camino de trocha. polvoriento y de serpentinas curvas, las cuales en el estrecho camino, en cada giro, se cruzaba con nosotros el brillo solar de medio día. Nos iban contando en el camino que existía la posibilidad que antiguos peruanos hayan conocido la mina, antes de la llegada de los españoles, es más, refieren que los restos de sulfuro de mercurio, que eran hallados en este yacimiento, eran utilizados por los guerreros de la nobleza para pintarse el rostro, así como las mujeres de la época. Ya por llegar, íbamos dejando en el camino una vieja planta procesadora, tras continuar por polvoriento camino de trocha, envueltos por las montañas del lugar. LA LEYENDA DEL DESCUBRIMIENTO DE LA MINA Una interrogante llevaría conmigo, como entender que un nativo pudo mostrar aun español la existencia de esta mina, refieren, que por el año 1563 el español Amador Cabrera fue llevado por el nativo llamado Ñahuincopa y en adelante, la Mina